15 de octubre de 2009

Sonata

Danzante figura tan perfecta,
Esbelta.
Desenvuelve su gracia,
Se mueve con delicadeza.

Toca con las yemas de los dedos
Las cosas que no están ahí.
Sus firmes palabras se desasen
En susurros consumidos por la noche.

Sus fragiles puños intentan atrapar la musica
Que impasible se desliza entre sus dedos
Siempre creyedo que al atraparla
no existira otro momento de soledad.